Experiencia BASKETBALL HALL OF FAME – Springfield

Como bien sabéis este verano ha vuelto a haber Road trip por Estados Unidos, pero esta ha estado plagada de planes y experiencias algo improvisadas, también las ciudades de este viajazo nos han permitido hacer más cosas y planear o improvisar planes.

Durante los 17 días que estuvimos hicimos muchísimas cosas, algunas planeadas y otras no tanto pero que merecieron y mucho la pena, la semana pasada os contaba cómo nos fue viendo un partido de los Red Sox, que tampoco teníamos pensado ver en Boston y hoy os vengo a contar cómo decidimos desviarnos en nuestra ruta para ver el museo del Baloncesto más importante de Estados Unidos, el Basketball Hall of Fame, donde por cierto ahora mismo está el increíble Pau Gasol entre los grandes que lo componen!!!

A continuación, os cuento dónde se encuentra, cuánto cuesta y todo lo que se puede ver y hacer en el impresionante ¡Basketball Hall of Fame!

Recordar que viaje forma parte de una Ruta por EEUU que realizamos el pasado junio, esta actividad ha formado parte de la etapa 2 de Boston a Canadá, no os perdáis las anteriores etapas y las siguientes ya que continuaremos hasta Miami! Nos te pierdas nada 😊

Esta parada no estaba programada en nuestra ruta y el día se iba a centrar en ir de Boston a Canadá, concretamente a Niágara donde nuestra idea era cruzar la frontera y pasar la tarde noche en la parte canadiense peero por el camino nos cruzamos con un cartel que nos informaba de que si nos desviábamos un poco podríamos visitar el Basketball Hall of Fame.

Pronto tendréis toda la información sobre nuestra llegada a Niagara y cómo fue cruzar a pie la frontera. ¡Estad atentos!

¿Qué es el Basketball Hall Of Fame?

El Basketball Hall of Fame es, como su propio nombre indica, el salón de la fama donde se encuentran los grandes jugadores, jugadoras, entrenadores y personal que han hecho o están haciendo historia en el Baloncesto.

Entre estos grandes se encuentran Kobe Bryant, Lisa Leslie o Dennis Rodman y ahora también podemos encontrar a ¡Pau Gasol!

Nosotros fuimos antes de que estuviera disponible la exposición dedicada a nuestro gran Pau, pero nos hubiera encantado verla, si vais disfrutadla por nosotros.

Además de jugadores históricos, hay algunos que no están como tal en el salón de la fama, pero se les da cabida en este museo por su relevancia actual. Tambien hay exhibiciones interactivas, trofeos y equipaciones y muchas cosas más.


¿Dónde está?

Por increíble que parezca este museo tan grande y especial no se encuentra en ninguna ciudad grande, de hecho, está un poco en medio de la nada en una zona que parece incluso un area de servicio sin más con locales medio vacíos al lado.

Se encuentra en Springfield, Massachusetts, entre Boston y Nueva York pero no os confundáis con Springfield Missouri que forma parte de la Ruta 66 que realizamos el año pasado.


¿Cuanto cuesta la entrada?

La entrada puede parecer algo cara desde fuera, porque además parece que va a ser pequeño, pero para nada. El lugar realmente es enorme, aunque a priori no lo parece y tiene *spoiler* su propia cancha de baloncesto, donde por supuesto puedes tirar y jugar todo lo que quieras, así que teniendo esto en cuenta cuando sales de haber disfrutado más de 2horas te parece hasta barato.

El precio de una entrada general es de 26$. La entrada es formato pulsera de papel que luego te puedes quedar de recuerdo.


Nuestra Experiencia

Como os contaba nosotros decidimos sobre la marcha desviarnos unos cuantos kilómetros para visitar el museo ya que nos consideramos fans del Baloncesto.

Por si no lo sabéis tenemos dos super equipos que jugamos en ligas municipal uno masculino y otro femenino podéis seguirnos en Twitch o en Instagram 🙂

Cuando llegamos el lugar estaba medio vacío en mitad de la nada y daba vibes rarunas de dejadez, pero no os asustéis porque la realidad no tiene nada que ver y nunca hay que juzgar un libro por su portada y este fue un ejemplo clarísimo de ello.

Antes de entrar hay una estatua que conmemora a los entrenadores, con diferentes placas de equipos de instituto, entrenadores y demás personas influyentes.

Una vez entras al lugar, que desde fuera parece un pequeño centro comercial, hay varias columnas con ropa y equitaciones oficiales algunas relevantes en la vida del jugador, datos curiosos como sus medidas, equipos y demás. Aquí encontramos a Luka Doncic o a Jason Tatum por ejemplo.

Pagamos la entrada y accedemos por un ascensor y si amigos aquí empieza la magia porque apareces en un enorme circulo desde el que se puede admirar una cancha de baloncesto y un cartel gigantesco lleno de leyendas que ya impresiona.

La primera parte está diseñada para que te tomes fotos, hay varios balones con los que medir el tamaño de tu mano en base a jugadores como Antony Davis, puedes medir tu envergadura y compararla con la de Antetokoumpo también puedes compararte con distintos jugadores como Muggsy Bogues o Shaquille O´neal y tras un buen rato viendo que tan bajito eres en comparación empiezan las exposiciones.

Por las siguientes salas ves equipaciones de equipos míticos, trofeos, ropa y cosas muy curiosas, puedes ver cómo ha evolucionado todo. No os voy a contaros todo lo que hay por no haceros más spoiler del que ya estoy haciendo, pero la verdad que hay cosas impresionantes.

También hay más cosas interactivas, un puesto enorme donde aprender técnica de la mano de los mejores mediante videos, una zona donde presentar un programa de la NBA. Eso moló porque, aunque a mí me salió fatal pues tienes que leer y va muy rápido y mi inglés es un poco meh, fue divertido, además el video es hiper realista como queda y te lo envían de manera gratuita a tu correo electrónico.

Resalto que esto sea gratuito, porque en otros sitios como en el Warner Bros Tour había un montón de sitios donde hacerte fotos y videos chulos peero que luego solo te los podías quedar si pagabas y eso en mi opinión debería venir con la entrada ya incluido.

Siguiendo con la exposición llegamos a una de las partes más impresionantes del mismo, el área dedicada a Kobe Bryant, esta para mí fue la mejor zona. Era pequeña, pero espectacular, con sus anillos, fotos de campeón, equipaciones y un vídeo sobre lo que es tener esa mamba mentality.

Continuamos con más expositores, alguna que otra zona con videos de celebraciones de grandes campeonatos, una sala llena de fechas y nombres relevantes para la historia del baloncesto.

Por último, llegabas a la cancha de Baloncesto situada en el epicentro del museo, aquí varios miembros del staff te ofrecían pelotas para que jugaras, además de las canastas reglamentarias también había una muestra de cómo las canastas habían evolucionado desde el inicio de este deporte, podías también tirar en ellas. En los laterales había canastas más bajitas para niños y una zona para poder hacer mates con canastas a distintas alturas.

Como no podía ser de otra manera de la cancha sales directamente a la tienda de regalos que la verdad podrían explotarla más porque me supo a poco, de hecho, no compramos absolutamente nada ninguno.


En resumen, el museo y la experiencia al completo estuvieron de 10, mereció la pena el desvío. Considero que este lugar esta bien diseñado tanto para amantes del baloncesto como para personas simplemente curiosas, tiene partes interactivas en las que tanto niños como adultos pueden entretenerse y aprender. Creo que no está orientado para ninguna edad en concreto como esos museos que se centran más en actividades infantiles que en información para adultos, aquí ambos quedarán contentos.

Nosotros disfrutamos mucho y sin duda nos mereció la pena el tiempo invertido porque fue muy divertido y entretenido pasar la mañana en un lugar así. He de recordar que este lugar es único en todo el país y que no se encuentra en ninguna de las grandes o principales ciudades turísticas de Estados Unidos por lo que coincidir por aquí sin ir apropósito era muy difícil y estas oportunidades hay que aprovecharlas.

Espero que esto os haya servido para planearos hacer una parada improvisada de vez en cuando porque os aseguro que no os vais a arrepentir 🙂


Regálame un dulce en mi próximo viaje

Con lo que cuesta un dulce puedes ayudarme a seguir creciendo y mejorando mi contenido 🙂

1,50 €

Deja un comentario