En nuestra ultima escapa de 2018, hicimos una parada de un dia en Astorga, ciudad que nos pillaba de camino hasta nuestro destino final del viaje, La Toja en Galicia.
Nunca había estado pero descubrí que quiero volver. Y la principal razon es su gastronomía.
Hoy os vengo a hablar de dos restaurantes, el primero, donde comimos, con un menú casero asequible de 15euros y el segundo, donde cenamos, futuro aspirante a estrella Michelin de visita obligada.
Astorga tiene bastantes buenos sitios para comer por el centro, nosotros no nos decidíamos, como nos pasa en el 99% de los casos y acabamos en este acogedor restaurante.
Solo había una familia comiendo, pero al cabo del rato se acabo llenando.
El lugar tiene una carta tradicional y un menú muy asequible formado por dos platos, pan bebida y postre por unos 15e todo. Salvo algunos postres toda la comida era casera casera, lo que le añade un punto extra la verdad.
Nosotros escogimos la opción de menú, pidiendo lo mismo para no tener envidia, de primero una sopa esquisita. Uno de las comidas mas típicas que tiene Astorga es el cocido maragato, por lo que su sopa no podía estar de otra manera.
De segundo, decidimos pedir un poco de carne, ternera con salsa de queso casera, yo que soy quesera no podía negarme a elegirlo y la verdad estaba de 10.
Por último los postres, mi chico unas natillas caseras y yo un flan con nata también muy rico.
El señor fue muy amable, quizá en exceso porque hablaba mucho con demasiada confianza y le faltaba sentarse a comer contigo para que la conversación fuera aun mas cercana. Aun así fue muy agradable.




Cotilleamos en internet sitios buenos para cenar y lo encontramos, tenia muchos comentarios positivos diciendo que porque no tenían ya una estrella y nosotros aficionados a MasterChef decidimos ir a juzgar si merece o no una.
Reservamos a través del tenedor, pero no nos salia confirmación, asi que nos acercamos para evitar imprevistos, y la atención a pesar de tener el restaurante a rebosar cuando fuimos fue inmejorable. Asi que nos fuimos con grandes expectativas para la cena.
Al llegar nos recibieron amablemente y se ofrecieron a guardarnos los abrigos, un detalle que nos recordó al Restaurante Belga que fuimos por San Valentín.
Nada mas sentarnos vino el señor a explicarnos la carta y las especialidades del chef asi como una selección de setas con las que realizan algunos de sus platos. Todo muy profesional, sin ser pesado la verdad.
En la mesa nos dejaron una especie de pate para untar muy rico cortesía de la casa.
Pedimos mi chico un canelón de lechazo que habían cocinado durante 24h. en el horno con trufa por encima, la cual nos la echaron en la mesa para que viéramos la calidad del producto, y la verdad estaba exquisito. Por el contrario yo me pedí unas carrilleras, que sin llegar al nivel de las de mi suegrito 😉 😉 pero estaban increíblemente tiernas y muy ricas.
De postre, yo me pedí un semi-frio de chocolate blanco y coulis de frambuesa, una especie de tarta de queso pero con chocolate blanco y mi chico el bombón de chocolate de Astorga. Se que me repito pero estaban ambos riquísimos.
No fue demasiado la dolorosa para lo bien que comimos, con propina incluida nos salió por menos de 30e. por cabeza.





Sin lugar a dudas Astorga es uno de los sitios donde mejor he comido, y creerme he comido mucho y en muchos sitios y esta ciudad se coloca peligrosamente en mi Top10. Quizá por detrás de Venecia, aunque mucha culpa allí la tuvo el desayuno del hotel.
Espero que os haya entrado el apetito, que visitéis esta ciudad perfecta para una escapada y que disfrutéis mucho de su gastronomía.
Un comentario en “Razones para ir a Astorga. Su gastronomía.”