Celje, encanto Navideño para ver en 1 día

Buenos días y Feliz año nuevo 🙂 la navidad ya se fue, aunque aun queda un poquito de ella.

Hoy os traigo un post un tanto cortito de nuestro viaje a Celje, un pueblo entre montañas en el que se respira un ambiente navideño ideal, de hecho es de esos pueblitos de montaña que son ideales y que parecen tan acogedores.

Celje es un pueblito esloveno que perfectamente se puede ver en un día, asique os voy a contar como fue nuestra bonita experiencia.

Comienza el viaje.

Para variar nosotros fuimos en tren desde Maribor y se tarda entre 30 minutos a 1h, dependiendo del tren que puede ser directo, por así decirlo, que hace como la mitad de las paradas o mas normalito, parando bastante.

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Cuando llegamos allí nos moríamos de hambre y desayunamos en la misma estación de trenes, la cual lucia muy antigua. Cuando salimos fue como wow!, todo era muy bonito.

Decidimos ir a la oficina de turismo porque queríamos subir al castillo pero no sabíamos como ni por donde ir. Al final no pudimos ir porque era mas de 1h andando montaña arriba y no sabíamos cual era exactamente el camino para subir andando, digamos que no nos entendimos con la chica que nos lo explico.

No obstante, yo os recomiendo encarecidamente ir porque he visto fotos y es muy chulo, también deciros que para subir al castillo lo ideal es verano o primavera porque hacen actividades y no hace tanto frio y si podéis subir en coche mejor porque seguro que el camino es mas corto y cómodo.

Desilusionados tras la caminata en vano en busca del camino para subir, (porque había señales pero no camino) regresamos y decidimos ver el pueblo en condiciones, viendo cada rincón.

Bajamos por la calle principal y fuimos calle por calle ya que su centro histórico podríamos decir que es como un cuadrado donde esta lo mas importante e histórico que tiene el pueblo. Así que nos lo recorrimos de punta a punta (esa parte del pueblo).

Uno de los últimos sitios importantes que visitamos fue la biblioteca, que es de estilo moderna y acristalada, pero muy bonita, y en la parte de atrás, que da al rio para cruzar al otro lado posee unas vistas preciosos, tienen como un jardincillo dividido en sectores pequeños donde había restos de ruinas antiguas.

Podías coger de un enorme libro a la entrada pequeñas citas, cogi una al azar y como no entendí nada la intente traducir pero digamos que la traducción del esloveno es bastante pésima. Asique dejémoslo en que es muy mono el detalle.

Paramos a comer en un restaurante que nos recomendaron en la oficina de turismo llamado Stari Pisker, al parecer este restaurante fue una vez un tipo de cárcel, o calabozo y aparte patrocino los European Championship Women U18, donde por cierto os doy el dato, en 2015 gano la selección española de baloncesto de sub18 la medalla de oro precisamente allí en Celje.

La comida del lugar tenían como de especialidad las hamburguesas, yo elegí un poco mal puesto que la mía como que picaba un poco, pero a mi novio la suya le encanto.

Tras comer continuamos viendo el pueblito, que es muy acogedor y estaban empezando a poner los adornos de navidad. Al ser una ciudad pequeñita, la vimos en una mañana puesto que despues de comer, paseamos por sus calles pero antes de que se hiciera de noche volvimos a casa.

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Espero que este post, pese a ser corito, os haya gustado y si decidís hacer un viaje a Eslovenia no dudéis en parar a visitar este pequeño pueblo con tanto encanto, ya que pese a que no suele tener mucha concurrencia de Turistas es ideal para pasar un par de horas.