¡Primer viaje del año! Dia 4. Tercera Parada Suecia. Malmö

Estos días os estoy contando como fue mi primer viaje del año 2018, porque desde el 2016 no empezaba un año viajando la primera semana y menos haciendo una ruta por varios países. Hasta el momento os he contado como fue nuestro primer dia y primera parada en Munich, nuestra segunda parada en Copenhague pasando el segundo y tercer dia allí y hoy os vengo a contar el cuarto día y tercera parada, Suecia. 🙂

Permaneced atentos a las redes sociales si no queréis perderos nada de nuestra ruta!

Tercera parada: Malmö 

Nuestro plan era madrugar y aprovechar al máximo en día yendo a Malmö, no madrugamos en absoluto porque la fiesta se nos fue algo de las manos en casa, a algunos además mas que a otros por lo que no dormimos mucho. No obstante no cambiamos los planes y nos fuimos, tarde, pero fuimos.

Desde nuestro barrio cogimos el metro en Svanemollen hasta la Estación Central donde cogeríamos un tren hacia Malmö, el trayecto no llego a una hora desde nuestra casa. Lo guay de ir en tren fue pasar por el puente de Oresund que une ambos países.

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La llegada a Malmö fue bonita porque ver de primeras el mar despejado era super bonito, ya os aviso que me gusto mas que Copenhague.

Fuimos hasta el pequeño faro interior del puerto me gustó muchísimo, de ahí dimos la vuelta por el otro lado hasta la escultura del Spectral Self Container, desde allí fuimos hasta la universidad viendo el canal.

Una vez admiramos el canal fuimos hacia el Castillo que he de decir que era muy sin mas, por dentro se parecía si habéis estado en Madrid al Centro Cultural Conde Duque en mi opinión, lo que si que me gustó fue un pequeño museo creado para ratones, muy original.

Después de eso fuimos al parque de detrás donde había un molino enorme, Castle Mill  y unos jardines que seguramente en otra época del año estarían mas bonitos, puesto que cada trocito era un hábitat y estilo distinto, era el parque Slottstradgarden, bastante grande además.

De allí fuimos a comer, no os he mencionado que la noche de ayer dejo a uno de nuestros miembros destrozado por lo que no paraba de quejarse, asique como buenos amigos elegimos un restaurante bueno para cuando tienes resaca, un mexicano.

El restaurante se llamaba Monkey Fist tacos, y os seré sincera no lo escogimos por fastidiar a nuestro amigo, si no porque teníamos hambre y fue el primero que vimos.

La comida era abundante y rica, tenia menú con varios tacos y limonada. Era pequeño y por poner una pega, que fue enorme en nuestro caso ya que llevábamos a uno de los niños malo, era que para ir al baño tenias que salir del restaurante e irte hasta la esquina y luego bajar unas escaleras. Estando de viaje lo que menos quieres es comer en un restaurante con el baño a 2 kilómetros. Por lo demás estaba rico.

La chica fue maja y nos hizo una especie de mapa para que llegáramos al centro y a otro canal bastante bonito también. Y allá que fuimos.

Llegamos a Lilla Torg una plaza con una lamparita de noche en medio muy mona tanto ella como la plaza. De allí caminamos callejeando hasta la estación de metro, donde nos esperaría nuestra cuarta parada.

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